Encontré este viejo "algo" en una libreta igual de vieja. Lo escribí a principios el 2006, con alguien en mente a quien llamaremos "V". Hoy lo releí, y aprovechando lo vivido en este largo inter, le hice pequeños ajustes y agregué algunas líneas que no se ciñen a la historia con "V"... pero igual venía al caso la mezcla y me gustó el resultado:
Estar contigo es no dejar de pensarte,
es abrazarte y sentirte a pesar de que no estás;
es besar un deseo, venderme una ilusión,
hacerle el amor a un espejismo siempre por "última vez".
Es soportar más de un adiós al mes,
aceptar la incertidumbre de un después;
es planear conmigo misma la historia de los dos;
es saber que es imposible y pretender que puede ser.
Es soñar, huir del despertar y con mi sueño ser feliz...
Estar contigo debería ser tocarte, amarte sin miedo, sentarme a tu lado para conversar.
Pero estar contigo es mucho más que estar presente,
y estoy contigo a mi manera,
pues amar, me has dicho tú, no es un sentimiento sino una decisión;
sin embargo, ya ves, no es tan sencillo, sobrepasa por mucho la intención
Intención que matan historias ajenas, viejos fantasmas repartiendo miedos;
la matan los límites que nos imponemos o se nos imponen a nuestro pesar;
la mata el despropósito, la mata el silencio, el egoísmo, la distancia...
la mata, finalmente, la decisión de matarla.
No hay comentarios:
Publicar un comentario