25 de febrero de 2011

El Café de Hoy: La Bohéme

Ubicado en la intersección de Tlacotalpan y Campeche en la Colonia Roma del D. F.

El lugar se ve muy cuco a primera vista; lo que me llamó la atención fueron los foquitos que decoran la entrada. Creo que no me senté en el mejor ángulo, ya que tengo como paisaje un Domino's Pizza, pero la mejor mesa -o la que parece la mejor- ya estaba ocupada... la pareja sentada ahí de hecho ya se va pero me da flojera moverme.

Mi primera impresión fue buena pero el mesero inició su servicio con una jetota que no me emocionó mucho. Tal vez amable en su estilo muy particular, pero jetón finalmente. Es un señor ya entrado en los 50's. En fin, la atención no fue de lo mejor pero pasa.

El café americano está muy "flojo" aunque la taza es de muy buen tamaño. No sé si incluye refill.

El menú es un tríptico bastante corriente aunque bien organizado y variado: platillos mexicanos, crepas dulces y saladas, gran variedad de desayunos, ensaladas, sándwiches. Y cierra a las 10 pm, es un horario decente.

El baño es muy chiquito pero limpio y huele rico.

Junto a mí se sentó una caliente y escandalosa pareja que después de pedir una jarra de clrericot que no llegaron a probar, dieron las gracias y se fueron. Creo que tuvo que ver con una llamada que recibieron de algún amigo.

Tienen buena música de fondo pero no sé si tienen internet, por ejemplo. Es algo ruidoso por la cercanía con insurgentes.

De pronto me quedé sola y eso lo torna un poco deprimente. Al pasar al baño no vi mesas ocupadas.

Pedí unas crepas de champiñones con queso de cabra y lo mejor que puedo decir es que el sabor es bueno, a secas, aunque la presentación deja mucho que desear. La salsa no tiene consistencia y tienen poco queso. No me encantó la combinación de calabaza y zanahoria, yo las haría con espinacas, o tomate deshidratado. Se enfriaron rápido. Lo que sí me gustó es que la pasta de la crepa es muy delgada y ligera. Creo que le pongo un 7/10 de calificación. Lo esperaba mejor, con gente.

Podría darles chance de probar otra cosa pero mejor no. Los precios son muy accesibles y sirven rápido pero no pasa de ser una fonda cualquiera al final del día.

Espero les sirva la reseña. En resumen no me quedan muchas ganas de volver.

Nos vemos en el próximo café!

18 de febrero de 2011

Tonex - Wired



Hasta hace 20 días no conocía esta canción, ni a su intérprete, y al día de hoy, en este corto lapso de tiempo, ha adquirido un significado realmente profundo para mí, no necesariamente por lo que dice sino por ser parte del soundtrack, por decirlo de algún modo, de un día muy importante para mí, en el que me conocí un poco más, me sorprendí, me frustré, me sentí feliz y ansisosa; satisfecha, motivada... hubo de todo.

Y bueno, ¿a qué se debió semejante mezcla de sentimientos? Les contaré. El 29 de enero decidí lanzarme a audicionar para una compañía de street dance. En realidad para quién o qué audicioné es lo de menos, el punto es que de entrada decidí hacerlo cuando, como ustedes sabrán -o deberían saber- siempre he sufrido de pánico escénico y fuertes ataques de desidia y autosabotaje. Pero esta vez me "obligué" de alguna manera ya que llevaba más de un año esperando la convocatoria a esas audiciones aun cuando no sabía si me atrevería a ir. Pero fue tan cósmico, tan... no sé; a pesar de estarla esperando no me enteré por mí misma sino por una serie de casualidades (suponiendo, por ponerlo de manera simple, que creemos que éstas existen): un bailarín, fan e imitador de Michael Jackson con el que coincidí o el destino me lo puso enfrente cuando menos venía al caso, y que resultó, además de todo, relacionado con D2XS, la compañía que convocaba a la audición. Y finalmente fue por la página de facebook de esa persona que me enteré del evento.

Curiosamente y contra todas mis expectativas, no estaba nerviosa, porque así como siempre he sufrido de pánico escénico, también sé reconocer mis virtudes y no tengo duda de que mi mayor pasión es bailar y que no lo hago mal. Lo siento pero las falsas modestias ya no son lo mío. Así es.

Con esa confianza fui y eso me ayudó a no salir decepcionada y frustrada conmigo misma ya que, aunque no me quedé porque el nivel que se maneja entre los asistentes realmente me supera por mucho, me sentí muy orgullosa de haberlo intentado; me sorprendí de no poder aprenderme una coreografía sin ningún problema, como lo he hecho siempre, porque se trataba de un estilo que jamás había bailado y que tiene un grado de dificultad considerablemente elevado. Y aun así, la hice. Tal vez no con el mejor estilo y con un toque de angustia, pero la bailé igual. Los pocos nervios que sentí fueron hasta el momento en que supe que también habría una prueba de freestyle que podía incluso tener mayor valor que la coreografía. No me hubiera preocupado si lo hubiera sabido desde antes, pero fue una total sorpresa, y como no suelo hacer freestyle en público, no sabía que hacer y mi cerebro hiperactivo me traicionó; quise inventar una coreografía en 10 segundos para apantallar y evidentemente lo único que conseguí fue bloquear mi percepción de la canción y mi habilidad para dejar que la música hiciera el trabajo sola...

Podría escribir todo un ensayo con los detalles del evento pero me limitaré a decir que salí feliz y sonriente por el gran aprendizaje que me llevé de todo esto. Del tipo de lecciones que te dan la oportunidad de crecer y mejorar aspectos específicos, que te hacen más "experto" en lo que te gusta, que te muestran otro aspecto de ti mismo... que te suben a las nubes y luego te dejan caer pero no para lastimarte, sino sólo para que sacudirte un poco y despertarte con una alarma en la mente a modo de recordatorio de todas esas cosas que se desvelaron con esta experiencia en torno a las cuales deberás tomar conciencia de dónde estás y a dónde vas; tomar conciencia de quién eres y de lo que eres capaz; saberte virtuoso y limitado a la vez, saber que siempre puedes mejorar, que nunca terminas de conocerte y sorprenderte a ti mismo.

Y claro, el tema que fue coreografiado en la audición fue esta canción de la cual adjunto el video. Tal vez a ustedes no les diga nada, y no sé si a mí me hubiera gustado de haberla escuchado cualquier día en la radio o por recomendación de algún conocido... pero el hecho es que me gusta, primero, porque enmarcó esta fecha en la que siento que crecí mucho internamente..., segundo porque para cerrar con broche de oro, la letra de la canción y la voz del hombrecito me movió bastante. Como sea, ahora "solamente" resta decidir y actuar.

Esperemos los pueda actualizar pronto con muchos avances de los proyectos que tengo en la cabeza.

Y hasta aquí mi historia motivadora. Nos leemos pronto!

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